GP España: Alonso abandona junto a otros ocho coches en una extraña carrera dominada por Raikkonen

El finlandés Kimi Raikkonen logró, con su Ferrari, imponerse de principio a fin en una carrera tan loca como accidentada, en la que solo acabaron trece coches, y en la que no faltaron accidentes.

En la salida, Alonso perdía una posición con Massa, Kubica lo hacía con el McLaren de Hamilton, y Heidfeld ganaba dos. Y fue a partir de ahí cuando empezó el espectáculo. En la curva 9, el alemán Adrian Sutil se tocaba con el Red Bull de Coulthard, por lo que el germano abandonó sin completar una sola vuelta. En el incidente también se vio involucrado el Toro Rosso de Sebastian Vettel, que se vio obligado a abandonar, por cuarta vez en las cuatro carreras que llevamos disputadas. Eso provocó la salida del Safety Car, que estuvo en pista durante cuatro giros. Vueltas después, Piquet hacía un señor recto, e inmediatamente después se tocaba con el otro Toro Rosso, el de Bourdais, y ambos abandonaban. El Super Aguri de Anthony Davidson también abandonaba con problemas en su maltrecho bólido. Raikkonen seguía al frente, con Massa relativamente cerca, y Alonso cerrando el podio. Hamilton se acercaba peligrosamente al español y por detrás, Kubica, Kovalainen, Heidfeld y Webber cerraban los puntos.

Pero entonces llegó la primera parada, por lo que se sucedió el habitual baile de boxes. Alonso, como se esperaba, era el primero en parar de los de arriba. Y le sucedieron, en las siguientes vueltas, Massa, Kubica, Hamilton, Webber y Raikkonen, lo que hizo que el español cayese hasta la quinta plaza. De los de arriba, solo quedaban sin parar Heidfeld y Kovalainen, que eran, de calle, los que más largos iban. Pero en la vuelta 22, el finés de McLaren sufría un espectacular accidente al estrellarse contra las protecciones debido a una rueda floja, lo que hizo que en Montmeló se temiese lo peor. El Safety Car volvió a salir, ahora junto al coche médico, a escena, y Nick Heidfeld, viendo truncada su estrategia de parar tarde, repostó. Pero no se dieron cuenta en BMW de que la calle de boxes permanecía cerrada, lo que acarreó una penalización de 'stop & go' para el alemán, que veía así como se esfumaban todas sus opciones de carrera. Alonso se colocaba sexto, pero tras la penalización a Heidfeld, se pondría quinto cuando se relanzó la carrera. Pero entonces, cuando más cerca estaba de Kubica, el español sufría una rotura de motor, que era ya de segundo ciclo, lo que causó estragos entre la melancólica la afición española. Y solo unos cuantos giros después, el alemán Nico Rosberg también reventaba el motor de su Williams, cuando era octavo.

Así pues, tras la primera parada y los incidentes que ésta acarreó, hubo grandes cambios en la clasificación. Raikkonen seguía primero, y por detrás, pegados rodaban Massa, Hamilton y Kubica. Mark Webber, sorprendentemente era quinto, y Jarno Trulli, sexto. Nakajima rodaba séptimo, y el octavo era, sorpresa, el Super Aguri de Takuma Sato. Y tras ellos, el Force India de Fisichella, el Honda de Button, el Red Bull de Coulthard, el Honda de Barrichello, el Toyota del decepcionante Glock, y cerrando la clasificación, el BMW de Heidfeld.

Tras la segunda parada, los cinco primeros puestos no se movían. Sexto pasaba a ser el británico Button, que estiró mucho la parada, y cerraban los puntos Nakajima y Trulli, que tenía muchos problemas en su parada. Tras ellos, Glock, Coulthard, Heidfeld y Fisichella luchaban por la 9ª plaza. Sato perdía mucho tiempo en su repostaje, quedando relegado a la última plaza. Y giros después, Timo Glock embestía a Coulthard al más puro estilo Hamilton en Bahrein. Heidfeld quedaba atascado tras un Fisichella que le tapaba todos los huecos. Barrichello abandonaba tras un problema con su alerón.

Hamilton y Kubica se acercaban peligrosamente a Massa, y más aún tras los doblajes. Pero no dio tiempo para más, y Raikkonen logró la 17ª victoria de su carrera deportiva, haciendo además un triplete ('pole', vuelta rápida, y victoria). Massa finalizaba segundo, escudando a su compañero, y a medio segundo, acababa Hamilton. Cuarto era Kubica, a algo más de un segundo del británico, y a un mundo acababa un sorprendente Webber, quinto. Button volvía a puntuar tras casi un año sin hacerlo, y Kazuki Nakajima finalizaba séptimo. Jarno Trulli acababa octavo, y Heidfeld, que logró quitarse a Fisichella de en medio, y que recortó 12 segundos a Jarno en cuatro vueltas, acababa noveno, pegado a Trulli. Décimo era el Force India del sorprendente Fisichella, seguido de Timo Glock. Coulthard finalizaba 12º, muy enfadado por su incidente con Glock, y cerraba la tabla Takuma Sato, con su decimotercer lugar.

En el mundial de pilotos, Raikkonen, con sus 29 puntos, continúa al frente. En segunda posición, a nueve puntos del de Ferrari, se sitúa Hamilton. Tercero es el polaco Kubica, con un punto menos, y cuarto Massa, con 18 puntos. Heidfeld, que continúa con 16 puntos, cae hasta el quinto puesto, y es la primera vez en tres años que se ve superado en la clasificación del mundial por su compañero Kubica. Sexto es Kovalainen, con 14 puntos. Y Alonso es décimo, con sólo seis puntos, pero con grandes sensaciones tras la mejora de su coche en esta carrera.

En el mundial de constructores, ahora lidera Ferrari, con 47 puntos, 12 más que la segunda, BMW, y tercera es McLaren con un punto menos que la escudería alemana. Williams se sitúa en cuarta plaza, pero con solo 12 puntos, y en séptimo puesto está Renault, con sus 6 puntitos, todos logrados por Alonso.

Ahora nos espera Turquía, concretamente el circuito de Istambul Park, dentro de dos semanas, y que nos servirá para valorar las verdaderas opciones que tienen Alonso y Renault este año, y ver si pueden, junto a BMW, presentar la alternativa contra Ferrari y McLaren.