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lunes, 2 de marzo de 2009

Liga BBVA; Jornada 25: Del cielo al abismo...


Sorprendente, extraña, insólita. Con estos adjetivos podríamos describir la trayectoria del Barça en los últimos tiempos. El club azulgrana suma cuatro encuentros consecutivos sin conocer la victoria, tres de ellos en Liga, donde ha sumado solo uno de los últimos nueve puntos en juego, y ha permitido que su más inmediato perseguidor, el Real Madrid, a base de casta, 'Robbendependencia', juego en equipo, y en definitiva, gracias a la efectividad merengue, se sitúe a solo cuatro puntos de los de Guardiola.


Culpa de ello tiene el Atlético de Madrid, que, un año más, volvió a atragantársele al Barça en el Calderón. Los de Abel, que llegaban al encuentro en horas bajas, se reencontraron con su mejor fútbol. Agüero se desperezó tras casi dos meses sin noticias suyas, y su conexión con Forlán volvió a ser letal. El charrúa, en un excelente momento de forma, se reivindicó como uno de los pilares básicos de este equipo, y excelentemente complementado con Simao y Maxi, fue quien lideró a su equipo, con permiso del 'Kun', hacia la inesperada victoria de los colchoneros en casa. Tirando de constancia, garra y buen juego, los colchoneros lograron remontar por partida doble un resultado adverso, y supieron sobreponerse a lo de siempre: un gol injustamente anulado a Heitinga a los dos minutos de choque, y al gol que supuso el 2-3 del Barça, en el cual Gudjohnssen se encontraba en posición ilegal. Todo a cargo, una vez más, del señor Bernardino González Vázquez, que volvió a empeñarse en ser protagonista.


Pero no todo fueron 'peros' en el encuentro. Ni mucho menos. Hubo fútbol, mucho fútbol, emoción, mucha emoción, explosiones de júbilo por doquier y, extraña circunstancia, aficionados madridistas sintiéndose rojiblancos por un día. El Atlético, con ganas de dedicar el triunfo al joven alevín Diego Alcalá, fallecido la pasada semana al caérsele el techo de un banquillo en la cabeza, no se amilanó en ningún momento ante el cada día menos temible Barça, que sin embargo se adelantó en el luminoso en el 11' de juego con un auténtico gol de bandera del francés Thierry Henry, que suavemente y con rosca besó la escuadra de Leo Franco. Entonces, el 'Atleti' comenzó a achuchar. Pudo empatar el partido, pero en lugar de eso, a la media hora, Messi hizo otra genialidad de las suyas para colarse hasta la cocina, regatear hasta a su sombra, y hacer el 0-2 sirviéndose de quiebros espectaculares. Este gol pesó como una losa en la parroquia del Manzanares, pero el peso se hizo menos solo segundos después, cuando Diego Forlán hacía su primero de la noche al transformar no muy lejos de la línea de mediocampo un tremendo zambombazo que pilló un extraño efecto y sorprendió a Valdés. El Calderón se lo comenzaba a creer. De nada importaba fastidiar otro año más al Barça y allanarle el camino al Madrid. Querían aleccionar humildad al Señor Boluda, dejándole claro que para 'chorrear' a un equipo, no basta solo con destilar prepotencia. El 2-2 llegó ya tras el descanso, cuando el 'Kun' logró aprovechar un fallo de Márquez al controlar un balón largo y batía a un Valdés que atraviesa su peor racha desde que defiende la meta del conjunto blaugrana. Era el empate. A partir de ahí, el Atlético se creció, se dejó llevar por los impulsos, y mantuvo en jaque la puerta azulgrana constantemente. El 2-3, en el 74', apenas cambió las cosas. De tanto sufrirlos, los rojiblancos han logrado convivir con los errores arbitrales, y por ello el tanto de Henry apenas supuso apuro ninguno, pues solo cinco minutos después, Forlán igualaba de nuevo el choque al materializar un clarísimo penalty cometido por el espigado delantero francés sobre su homónimo Sinama, y que el colegiado concedió en última istancia. El encuentro se acercaba a su recta final, y era el 'Atleti' quien, comandado por un renacido Maniche que entraba en el 74', tenía el control absoluto del juego. El gol de los de Resino parecía solo cuestión de minutos, pero ya se sabe que éstos son capaces de lo mejor y de lo peor en tan solo efímeros instantes. Esta vez, la suerte se puso de lado local, y Agüero, certificando por qué se le puede comparar a Messi, deleitaba a todos los allí presentes con sendos driblos que finalizaban en el fondo de la puerta defendida por Valdés. Corría el minuto 88' y el Calderón estallaba, y con él el Bernabéu. Ambas hinchadas celebraban éxitos dispares, pero al fin y al cabo, un triunfo que devuelve a los colchoneros con sus 39 puntos a la lucha por puestos Champions tras los pinchazos de Málaga, Villarreal y Valencia, y que deja a los de Guardiola líderes en solitario, con 60.


Pero como ya digo, la distancia con el segundo, el Real Madrid, es de solo cuatro puntos. Hace solo tres semanas, la Liga se veía imposible en Concha Espina, pese a llevar acumulados por entonces siete triunfos consecutivos que, pese a todo, les garantizaban la segunda posición liguera. Pero tras los pinchazos del Barça en Sevilla, Madrid y en su estadio ante el desahuciado Espanyol, las cosas han cambiado, y ahora absolutamente todo el madridismo piensa que sí es posible, que su equipo puede ganar la Liga.


Sin embargo, una vez más, el Madrid volvió a demostrar su peor imagen, que parecía mejorar tras los encuentros ante Betis y Sporting, pero siempre dejó vidente su efectividad de cara al gol. Ante el Espanyol, su juego fue pésimo del todo, salvando algunos compases del segundo periodo que les valieron para sumar su décima victoria consecutiva en Liga. Tras una primera parte que supuso un extremo castigo para todos los aficionados al fútbol, Guti, que había entrado tras el descanso, avivó la chispa de su equipo al conseguir, de falta directa y con la inestimable colaboración del cancerbero camerunés Kameni, el primer gol del encuentro que ponía a los blancos por delante a los 68' de partido. Este gol hizo naufragar definitivamente al club perico, que no dejó siquiera rescoldos de buen juego. El capitán madridista Raúl, solo 5' después, cerraba el marcador tras culminar una gran jugada individual de los suyos, logrando así su gol 14 en lo que va de Liga. De este modo, los de Juande, como ya adelantamos antes, se ponen con 56 puntos, mientras que la entidad blanquiazul se mantiene en penúltima posición, con 21 puntos y sin aire ninguno de mejora.


Por otra parte, y dejando de lado la lucha por la Liga, destacaremos el triunfo del Sevilla en la Catedral de San Mamés ante un Athletic plagado de suplentes ante el inminente partido de Copa que disputarán el miércoles ambos equipos. Caparrós, que considera que puede ser su año en el torneo del KO, alinéo un desconocido once que, sin embargo, pudo dar la sorpresa. Mentalizados en no encajar ningún gol, y planteando un fútbol rácano en desacuerdo con el juego de los leones en la presente temporada, los rojiblancos se adelantaron por sorpresa a la media hora de juego por medio de un remate a bocajarro de Gabilondo a la salida de un córner. Sin embargo, la reacción de los de Jiménez no se hizo esperar, y una vez más, estuvo fundamentada en buscar a Kanouté, y luego que sea lo que Dios (o la Virgen del Rocío) quiera. Esta vez, a los hispalenses les volvió a salir de pleno la estrategia, pues el punta maliense logró ver puerta por partida doble aprovechando buenísimas asistencias. Empató en el 38' y cerró el resultado en el 60', demostrando una vez más, su importantísimo peso en las alineaciones sevillistas, y que es un auténtico quebradero de cabeza para cualquier portero, esta vez, para el vasconavarro Armando. De momento, ya lleva 10 dianas en 21 encuentros jugados, algo digno de deseo de muchos delanteros de nuestra Liga. Así, los andaluces se mantienen sin problemas terceros, con 47 puntos, por 31 de los vascos, que siguen en la zona tranquila.


Tanto a Sevilla como a Atlético les vinieron de perlas los pinchazos del resto de equipos implicados en la lucha por los puestos Champions. En primer lugar, hablaremos del que sufrió el Valencia en Mestalla ante el Valladolid, en un encuentro en el que los pucelanos dieron la puntilla a los de Emery, que, acuciados por la crisis, no cobran desde hace meses. Los blanquivioletas, que vienen semana tras semana demostrando ser capaces tanto de lo mejor como de lo peor en un suspiro, jugaron al fútbol como saben, con orden y toque, haciendo una gran primera mitad en la que se pusieron 0-2 gracias a un tempranero gol de Sesma y a un fallo de Albiol, que, tras despejar César un tiro de Víctor, introdujo el cuero rebotado en el fondo de sus propias mallas. Ya en la segunda parte, los de Mendilibar se amedrentaron, como viene siendo habitual, pero el Valencia, que no sabe jugar sin Villa, sancionado, apenas inquietó al paraguayo Justo Villar. Solo la entrada de Manuel Fernandes y de Vicente al terreno de juego dio algo de aire al Valencia. Los chés parecían querer despertar, más aún tras el 1-2 logrado de cabeza por Marchena. Sus ganas se acrecentaron en el 80' de juego, con la expulsión del lateral del club castellano Pedro López, pero el tanto del empate no llegó, y con un Iñaki Bea, de los mejores del Valladolid, sangrando por la cabeza, se llegó al final de un partido que deja a la entidad valenciana con 39 puntos en sexto lugar, por los 33 del Valladolid, que es noveno.


El Málaga, otro de los implicados en esta lucha, también cayó en su feudo, sorprendentemente, ante el Recreativo de Huelva. Los onubenses dieron la gran sorpresa de la jornada al imponerse por 0-2, demostrando que la dupla Adrián Colunga-Camuñas se entiende a las mil maravillas. Y eso, unido a la más que rigurosa expulsión de Lolo a la media hora de juego, te deja muy mermado y vulnerable en este mundillo que del fútbol. Como bien dijo Alcaraz, la expulsión del centrocampista sevillano cambió la tónica del choque, e hizo que el Málaga pasase de dominante a dominado en cuestión de minutos. Apoño no podía duplicar su trabajo, y ni Duda ni Eli bajaban a ayudarle. Para colmo, eran los defensas quienes subían a complementar al centrocampista revelación de la Liga, y eso lo pagaron caro, pues en el 55' de juego, Camuñas, que está haciendo una gran segunda parte del campeonato, adelantaba a los suyos con un excelente disparo desde la frontal ante el que nada podía hacer Goitia. La moral del club de la Costa del Sol quedaba así a merced de los de Alcaraz, que mataron el partido solo 10' después gracias a una gran conexión entre Camuñas y Colunga que terminó con el 0-2 final. En definitiva, los de Tapia no supieron sobreponerse al miedo a abordar la Champions, y si encima se quedaron con uno menos de manera injusta, pues apaga y vamonos. Esta derrota deja séptimos a los locales, que cuentan con los mismos 39 puntos que la zona noble, mientras que el Recre puede tomar aire y colocarse con 29 puntos en las posiciones de tranquilidad.


Falta hablar del pinchazo del Villarreal ante el Betis en el Ruiz de Lopera. Los amarillos llegaron a tener el encuentro muy fácil, pues lograron ponerse 0-2 arriba a los 36' de juego merced a dos tantos de Santi Cazorla, y consiguieron tener a los de Chaparro (que toma aire jornada a jornada), como una muñeca danzando en sus manos. Sin embargo, cuando mejor jugaba el Villarreal, llegó el 'gol psicológico', en el 43' de juego, obra de un Sergio García casi inédito en cuanto a juego en lo que va de campaña. Así, y como suele pasar con este tipo de goles, el club que marcó salió más enchufado tras el descanso, y obtuvo su premio en forma de empate por medio de Oliveira, que ya suma tres goles en los cuatro partidos que lleva como verdiblanco. A partir de ahí, las ocasiones se sucedieron para ambas entidades, obligando tanto a Diego López como a Ricardo a sacar a relucir sus grandes dotes bajo palos. Finalmente, un 2-2 que sabe a poco en ambos equipos, pues los verdiblancos continúan titubeantes al filo del descenso con sus 27 puntos, y los de Pellegrini, pese a continuar en cuarta plaza con 42 puntos, pierden una oportunidad de oro para distanciarse de sus perseguidores.


Hablemos ahora de la lucha por el descenso, donde, quitando a Espanyol y Numancia, hay siete equipos metidos en cinco puntos que, para más inri, vienen fuertes, y con enfrentamientos directos que han venido ya y que quedan por venir en las próximas jornadas.


Preocupa especialmente el caso del Numancia, al que ni siquiera 'Pacheta' ha logrado devolver a la senda del triunfo, y que ya suma siete derrotas consecutivas en Liga. La última, la cosechada este domingo en Los Pajaritos ante un Depor bastante rácano, pero que supo demostrar su superioridad cuando fue necesario ante un combatitivo club local. Los de Lotina vencieron por 0-1 y sin apenas desmelenarse a un Numancia desmoralizado, pero peleón, gracias a un solitario tanto de Juan Rodríguez en el 75' de juego, que deja al club numantino como colista con 20 puntos, y a los coruñeses enganchados al tren de arriba con 39, siendo novenos.


Sin embargo, en el grupo que lucha por salvarse, cabe destacar la victoria del Almería en el Estadio Mediterráneo ante el Getafe por dos goles a uno, en un encuentro en el que el punta Negredo hizo valer el por qué de que Del Bosque le tenga en su lista de futuribles para la selección. Con un doblete, el delantero vallecano -que ya lleva 15 en Liga- completó la remontada de su equipo (que perdía por 0-1 tras un gol de Guerrón en el 7' al aprovechar un rechaze), y certificó que el juego que hace Hugo Sánchez es digno de ver. Los andaluces se alejan del peligro, ascendiendo al noveno puesto, mientras que los madrileños, con 28, se mantienen en la 14ª plaza, con tres puntos más que la zona de descalabro.


Además, el Mallorca de Manzano confirmó que atraviesa un gran momento de forma al imponerse en El Molinón a un Sporting que comienza a preocupar al sumar una nueva derrota. Una genialidad de Arango en el 50' fue suficiente para contrarrestar los inútiles esfuerzos de los de Preciado, que se complican así mucho la vida, al ocupar el puesto 17º, a solo dos de la zona de descenso que marca ahora Osasuna, mientras que la entidad balear logra salir de los puestos de descenso, pues sube al decimosexto puesto, con los mismos puntos que los gijonenses.


Y para terminar, hay que remarcar el empate entre Racing, el que más empata en casa, y Osasuna, de los que menos gana fuera, a un tanto en El Sardinero, en un partido con ocasiones para ambos lados, y bastante entretenido. Los de Muñiz se adelantaron en el marcador a los trece de juego al culminar Óscar Serrano una buena jugada en equipo, tanto con el cual se rompió la imbatibilidad del meta osasunista Roberto, que llevaba casi 450 minutos sin encajar. La cuenta santanderina pudo aumentar si Iturralde hubiese pitado un claro penalty de Monreal sobre Jonathan Pereira a la media hora, pero en lugar del 2-0, llegó el 1-1 obra de Pandiani al filo del descanso. El segundo tiempo fue un mero trámite, con alguna que otra ocasión suelta para los dos bandos, pero con las que apenas Toño y Roberto fueron inquietados. Así, Osasuna vuelve al descenso al contar con 25 puntos, mientras que el Racing continúa, con sus 30 puntos, en zona de nadie.


En resumen, la vigesimoquinta jornada del Campeonato Nacional de Liga ha servido para dejar claro que hasta el rabo, todo es toro, o lo que es lo mismo, que hasta que la estadística diga lo contrario, hay Liga. El Barça, al que comparaban con el 'Dream Team' de los Cruyff, Stoickhov o Guardiola hasta hace no tanto, parece deshincharse por momentos, mientras el Madrid va ganando el prestigio que personajillos como Ramón Calderón le han arrebatado en los últimos años. La próxima jornada tendrá como plato fuerte el gran derbi, el siempre emocionante Real Madrid - Atlético de Madrid en el Santiago Bernabéu, mención especial del Barça - Athletic del Nou Camp. Ya saben, una vez más, podrán disfrutar de dichos encuentros desde aquí, además de de los clásicos análisis de datos que siempre hacemos en esta página antes de los grandes partidos. De nuevo, reitero en lo mismo, que ya empieza a ser un tópico de esta página: No se lo pierdan.

1 comentario:

Anónimo dijo...

de robbendependencia nada 0-4 al sporting,, 6-1 al betis cn robben n el bankillo

Otro año sin Puerta