Clásico: Quedan cuatro días

A solo cuatro días del 13 de Diciembre, día en el que Barcelona y Madrid se enfrentarán en el Camp Nou, y ni siquiera 48 horas después de la 'rajada' de Schuster en la que decía que "es imposible ganar en el Camp Nou a día de hoy, pues el Barça está a otro nivel", el club merengue ha optado por la destitución del entrenador, que en los últimos tiempos parecía partidario de ella, para intentar enderezar la mala racha madridista. Juande Ramos, despedido el mes pasado por el Tottenham Hostpur de la Primera División inglesa, será el encargado de llevar a cabo dicha gesta, siendo el elegido por la dirección técnica del Real Madrid como sustituto del germano. Cabe destacar en este triste capítulo, que el técnico se ha despedido de su plantilla por un mísero SMS, y que ha sido él mismo quien ha querido llegar a estos extremos, con sus borderías, sus malos modos, sus comentarios y lo que es más importante, su estilo de juego que no está cualificado para un club como el que entrenaba.

Aunque se preveía que esta decisión se tomase tarde o temprano, ha sido más pronta de lo esperado, y también más polémica. Bien cierto es que en los últimos tiempos la ha forzado con sus declaraciones en las que veía imposible ganar al Barça, club del que además es socio, y que han sido el detonante final de esa bomba de relojería. Unas declaraciones que Guardiola se tomaba a guasa y como una estratagema del alemán para distraer al mundo del fútbol y a las que el capitán madridista Raúl González respondía con contundencia: "Estamos convencidos de que ganaremos en el Camp Nou; no vamos a bajar los brazos y lo que no se puede es darnos por muertos a estas alturas de temporada" matizó el '7'. También Higuaín, Casillas y Míchel Salgado se dedicaron a replicar las palabras de su técnico, que calificaron de "erróneas" pues, al igual que Raúl, también apuestan por "salir a por todas y ganar el clásico".

Hay que saber que la estadística no favorece al cambio que Mijatovic, Portugal y Calderón han considerado oportuno. Este año, eso de 'entrenador nuevo, victoria segura' no funciona. Ni Camacho con Osasuna, ni Alcaraz con el Recreativo, ni Mané en la pasada jornada con el Espanyol consiguieron ganar en su debut en su nuevo banquillo.

Por otro lado, y apartando el tema de Schuster, que se acentúa aún más tras la dimisión la semana pasada del legendario jugador Michel, antiguo responsable de los filiales madridistas, tras la " tremenda desconfianza que mostraba Ramón Calderón en él y en las categorías inferiores del equipo" como la calificó el jugador, el defensa Daniel Alves, que últimamente vuelve a ser el que era, haciendo valer los más de 30 millones que se pagaron en Verano por su fichaje, ha retado a Iker Casillas de cara al choque del próximo sábado, pues dice que el pronóstico del mostoleño, que da a su equipo como ganador, deberá "demostrarlo en el campo, que es donde deben quedar claras las cosas".

Además, los de Guardiola querrán resarcirse de aquel 4-1 cosechado en el Bernabéu el pasado mes de Mayo. En aquel encuentro, además, los entonces pupilos de Rijkaard fueron humillados por el club merengue, al que además tuvieron que hacer 'paseillo' en una de las imágenes más morbosas de la historia, pues justamente en la jornada anterior el Madrid había logrado matemáticamente el título de Liga ante Osasuna en la 35ª jornada. Esa imagen siempre quedará en las mentes de los allegados del Can Barça, y los aires de revancha de un equipo que está en estatus pletórico dan más emoción a un choque ya de por si calentito.

Falta analizar los grandes ausentes de este partido. El club merengue es el más castigado por las bajas, pues a los lesionados Van Nistelrooy, Diarrá (estos dos estarán todo el año de baja), Pepe, Rubén de la Red, Miguel Torres, Heinze o el meta Jordi Codina, se unen el lateral Marcelo y los holandeses Drenthe y Robben, ausentes por sanción. Es curioso el caso del extremo, pues, tras casi toda la temporada lesionado, fue expulsado el día de su retorno en el Bernabéu por doble amarilla ante el Sevilla y se perderá el Clásico. Por el club local cabe destacar las ausencias de Andrés Iniesta, uno de los máximos exponentes del equipo azulgrana, y del central Gabi Milito, lesionado de gravedad desde la pasada temporada.

Quien sí estará será Samuel Eto'o, recuperado de sus molestias que le impidieron perderse el partido ante el Valencia, que junto a Thierry Henry, que está volviendo a ser el de antes, y el argentino Leo Messi, formará un ataque de ensueño complementado por los Xabi, Hleb o Touré Yayá en el mediocampo. De lujo.

Con todo esto, las casas de apuestas dan como favorito a la entidad de Laporta para el choque. En 'Bwin', se paga a 1'55 euros la victoria local, a 3'60 el empate, y a nada menos que 5'60 se cuotea la victoria madridista. 'Interapuestas' mide a 1'60 el triunfo de los de Guardiola, a 3'50 las tablas, y postula el triunfo madridista a 5 euros. Por su parte, 'miapuesta.com' cuotea también a 1'50 que el partido se lo lleva el Barça, midiendo el empate a 3'75 y la victoria de los de Juande a 6 euros. La casa '888' no quería ser menos, y también da a los azulgrana favoritos con cuotas de 1'57 victoria local, 3'60 empate, y a 5'50 ponen el '2' en las Quinielas.

A priori, parece que el Madrid va a necesitar un milagro para salir vivo del estadio barcelonés, y no a 12 puntos si ocurre lo que predicen las apuestas. Pero nada es imposible.